Crónica pospartido (Sevilla 0 - Getafe 1) Jornada 30ª de Liga

Hemos perdido el partido, algo que parecía difícil que ocurriera por muchos motivos, algunos de ellos fundados en la debilidad del rival y en sus números de casi toda la temporada. Aunque fundamentalmente por la trayectoria que estaba llevando nuestro equipo en los últimos partidos, y no sólo de resultados, ya que por lo visto estaba contento TODO el sevillismo con esta la mejor cara de la temporada. Algún día había que perder, claro, no pasa nada. Para eso habíamos ganado una buena ventaja sobre el resto de equipos de “nuestra liga” (expresión muy al caso pero que no deja de ser otra incorrección periodística aceptada, ya que no jugamos todos el mismo campeonato??). Pero a mi la sorpresa me lo hace doblemente doloroso. Y ahora vendrán los más viejunos con eso de que históricamente en semana santa y en feria se pierden partidos como estos, que son semanas raras y no sé que más historias para no dormir. Pues señores, hoy por hoy esto no me vale. Ha sido una semana rara para mi, por ejemplo, que me harto de currar todas las semanas y en esta última he tenido un puente de cuatro días para irme a Cabo de Gata. Pero el equipo ha entrenado con normalidad (o debería) y ha tenido todo el tiempo del mundo para preparar el partido, más que en la mayoría de jornadas. No me querrán hacer pensar que Romaric y Koné trasnocharon para ver íntegramente la madrugá a pie de bulla. En fin que vamos, como siempre, por partes.

El equipo salta con Palop, Adriano, Squillaci, Drago, Navarro, Maresca, Renato, Romaric, Navas, Kanuté y Luis Fabiano. Jiménez no quiso salirse del nuevo esquema y mantuvo al costa marfileño en la izquierda, para lo que introdujo en el campo al Capo para sustituir al lesionado Duscher. No sé si es gafe lo que tiene el italiano esta temporada, pero partido que juega partido que sale nada más que regular. Porque aunque sigo pensando que su juego ahora no aporta grandes cosas en este Sevilla (que nadie lo interprete como una falta de respeto porque no aplica) creo que no ha hecho un mal partido, y que con Duscher en el campo no se hubiera jugado mejor. Dicho esto también he de decir que cuando supe la alineación titular discrepé con el mister en esto de mantener el esquema, y que yo hubiera salido con dos extremos. Así se lo hice saber a mi novia algo ofuscado, única persona que en ese momento tenía cerca para desahogarme, quien incluso entendió mi postura pese a su nulo interés por el deporte rey. Pero ayer no se perdió por esto que os cuento, no. Ayer se perdió por otras cosas más básicas en esto del fútbol, como son la actitud en una primera parte tirada a la basura y la suerte de no hacer gol cuando tienes un bagaje a tu favor de ocasiones de 13 a 3.

El equipo saltó con un juego ramplón, lento y previsible, con el que a una defensa de 10 tíos por detrás de la pelota resulta difícil sorprender. Primera parte aburridísima, que sólo se salvó durante 5 minutos de zafarrancho de los nuestros (del 17’ al 23’), que se materializó en un buen disparo desde la frontal de, precisamente, Maresca, respondido con una buena intervención del portero rival. Arenga de Jiménez en el descanso y a correr. Cierto es que el Sevilla saltó al segundo acto con mejor actitud, pero seguía echando en falta la transición rápida del balón de una banda a otra, esa que desfondó al Valladolid y al Málaga (dos equipos mucho mejores que el Getafe). Y no la encontré en todo el partido. Se insistía una y otra vez en el pelotazo a Kanuté o en pases interiores imposibles entre tanta pierna rival. En el 53’ saltó Perotti por Maresca y en el 64’ Capel por Navas, y se mejoró algo, básicamente porque empezaron a llegar centros desde los extremos y no desde la defensa. Pero ayer tampoco era el día de nuestros delanteros. Hasta 3 balones al palo estrellaron entre Kanuté y Fabiano. Y en el minuto 80’ fallo incomprensible de Squillaci (que hasta entonces estaba haciendo un partido enorme) que con un balón fácil y controlado se hace un lío y se la entrega a Gavilán, para que este, con cierta calidad, la cruce ante la salida a la desesperada de Palop. Tercera llegada del Getafe y gol. El equipo con el planteamiento más antifútbol que he visto este año en el Pizjuan, el más cobarde, se llevó el botín completo. Pasa 1 de cada 10 veces, y ayer pasó. Fue un partido malo de los nuestros, pero nunca merecimos siquiera empatar, porque el que sale a ganar merece al menos empatar y el que sale a empatar no merecerá jamás otra cosa que perder.

Como decía al principio, no pasa nada, el objetivo de la tercera plaza se mantiene tan alcanzable como hace una semana gracias a la derrota del Villarreal. Pero si que me preocupa una cosa, y es el hecho de no entender por qué se ha jugado tan mal, y no me vale como explicación (a mi, ojo, a ti a lo mejor si) que el rival también juega (porque ayer no fue el caso) ni tampoco lo de la Semana Santa (por lo comentado al comienzo de la crónica). No entiendo que un equipo que lleva 5 o 6 semanas con un buen juego mecanizado cambie su estrategia y decida no jugar a nada. Sencillamente se escapa a mi comprensión. Claro que en toda una temporada puede haber partidos malos y partidos buenos, y que mereceremos ganar algunos partidos que perdemos y que mereceremos perder algunos partidos que ganamos. Si es torrija mental de los jugadores me gustaría que nos lo dijeran, si pensaban que al Getafe se le ganaba sin un mínimo de esfuerzo mental que nos lo digan, si estaban cansados por algo que nos lo digan. Sea lo que sea de todo ello es perdonable y subsanable, pero de verdad que me gustaría (por lo menos a mi) que alguien me lo aclarara.

Por último, me gustaría hablar de nombres propios. No entiendo que ha pasado con David Prieto, que desde lo de Bilbao no entra en las convocatorias. Ayer Drago no estaba para jugar, así de claro. Estaba inseguro, llegaba tarde, medía mal… y sólo la buena actuación de Squillaci nos salvó de algún susto más. ¿De verdad que David Prieto no estaba ayer mejor que Drago? ¿Qué pasa con este buen central? Si yo fuera el chaval me deprimiría viendo el partido de Drago y el de Mosquera de hace una semana. Hoy por hoy el canterano es el tercer mejor central de la plantilla, así que si no se va a contar con él entiendo que la secretaría está buscando al menos dos centrales para la próxima temporada.

Mankiw